*Mientras, en casa de los
chicos.
-¿Crees que se lo estarán
pasando bien? ¿Y que las chicas serán guapas?-preguntó Harry desde el sofá con
el libro de Historia sobre las piernas.
-Pues no lo sé, pero no
entiendo por qué le das tantas vueltas, Harry. No te engañes más, ni siquiera
es cierto que te has quedado para estudiar para un examen, voy a Historia
contigo y no tenemos ningún examen- dijo Niall.
-Bueno, pero lo habrá y yo ya
estaré preparado porque habré estudiado antes que todos- replicó Harry.
-No puedes seguir así, no me
gusta verte de esta manera. Tienes dos opciones: puedes quedarte en ese sofá
esperando a que Rebecca vuelva o puedes mirar hacia delante y abrirte a nueva
gente, relacionarte con otro ser humano, ya sabes, seguir con tu vida como ha
hecho ella- le aconsejó Niall.
-Joder tío, qué profundo.
Pero tienes razón -se levantó del sofá de golpe- no quiero seguir viviendo como
un vegetal sin reaccionar a nada. Eso se acabó, tengo que mirar hacia adelante
y seguir con mi vida, no puedo estar esperando a que la chica que ya no me
quiere vuelva a buscarme, porque no lo hará. Así que voy a pasar página y a
continuar. Voy a ser un nuevo y mejor Harry que no va a dejarse hacer daño por
ninguna chica más.
-¡Uau! Lo tuyo sí que es
profundo -se rió Niall-. Me alegro de que hayas tomado la decisión correcta,
sabes que a ninguno nos gusta verte en modo vegetal. Además, Louis se preocupa
mucho por ti, y si tú estás mal, él también lo está.
-Gracias Niall, de verdad me
has ayudado mucho. Hasta ahora no había querido abrir los ojos y aceptar lo de
Rebecca-agradeció Harry
-De nada, tío. Para eso están
los amigos-cerró Niall.
*De vuelta a la cena. (Narra
Candy)
Era increíble como en unas
horas puedes llegar a tener tanta confianza con una persona. Y es que Liam y
Zayn eran súper majos y divertidos. Mientras nos tomábamos el chocolate
sentados al lado de la chimenea me sentía como si los conociera de toda la
vida. Estaba claro que llegaríamos a ser grandes amigos. Aunque era una pena
que Harry y Niall no hubieran podido venir, sentía una especial curiosidad por
conocer a Harry, no sé, algo en mi interior me decía que sería un chico
especial. Claro que mi interior no tenía ni idea, porque con mi último novio
pensé que tal vez pudiera ser algo definitivamente serio, pero mi interior se
equivocó: lo único serio fue la seriedad con que me mentía cuando me decía que
yo era la única. Pero bueno, prefiero no pensar en ese idiota.
Estaba algo cansada, había
tenido un día agotador, yendo arriba y abajo de tiendas y después toda la
''juerga'' con los chicos, ¡de verdad que agota!
-Chicos, no quiero cortaros
el rollo ni nada, pero ¿no crees que es hora de ir hacia el campus, Amanda?
-¿Qué hora es? -miró el
reloj, eran las dos de la madrugada- ¡Oh, Dios mío! ¿Cómo vamos a entrar en el
edificio sin que nos pille la conserje amargada? ¡Seguro que nos pone a fregar
váteres de castigo! -Amanda se puso melodramática, como siempre, está claro que
ser actriz le va como un guante.
-Chicas podéis...-intentó
decir Louis.
-Bueno, Amanda, no nos
precipitemos, aunque seguro que acabaremos castigadas, pero a lo mejor podemos
entrar por la ventana-le interrumpí yo.
-Pero si es de doble cristal
para el frío y está cerrada.-dijo Amanda.
-Emm, chicas...- empezó
Louis.
-Es verdad...bueno, pues
dormiremos en el coche, yo delante y tú detrás. Será algo incómodo, pero qué le
vamos a hacer-volví a interrumpir.
-¡Qué bien! -dijo Amanda con
un sarcasmo exagerado.
-¡Chicas!-esta vez Louis gritó.
-¿Qué pasa, Louis? -dijo
Amanda.
-Si queréis podéis quedaros
en nuestra casa, tenemos una habitación de invitados- dijo por fin Louis.
-Pero, ¿no será un poco raro?
Quiero decir, nos acabamos de conocer- repliqué yo.
-Sí, tal vez os resulte incómodo...-reconoció
Louis.
-O podemos llamar a Danielle.
En su casa tiene una habitación de invitados, además creo que hoy todas las
chicas se quedaban a dormir, así también podréis conocerlas a ellas. Os caerán
bien enseguida, son muy simpáticas- explicó Liam.
-¿Seguro que no les importará?-
dijo Amanda.
-¡Qué va! Seguro que tienen
un jaleo enorme allí montado, estarán encantadas de tener dos chicas más en el
grupo- repuso Zayn con convicción.
-Bueno, entonces genial. ¿No,
Amanda? Seguro que será divertido. Además mañana no hay clases, y podremos
dormir hasta tarde- dije yo.
-Bueno, pues vamos para allá.
Tengo ganas de conocerlas- dijo Amanda.
Recogimos todos los trastos
que habíamos sacado y nos dirigimos hacia el coche. Tomamos una carretera
diferente a la que habíamos usado para venir y en unos veinte minutos llegamos
al apartamento de Danielle que, por lo que nos contaron, es el más grande de
los de las chicas y por eso se reunían allí. Cuando Liam y Zayn hablaron con
Danielle y Perrie no pareció que les importara que nos acopláramos a su fiesta
pijama, es más, parecían contentas. Entonces nos acercamos y nos presentaron a
todas las chicas. En realidad, en la reunión estaban las novias de los chicos y
algunas de sus amigas: Danielle, Selena, Perrie, Eleanor, Taylor, Demi, Nicki y
Laura. Nos sentimos un poco incómodas cuando entramos, ya que no conocíamos a
nadie, pero cuando nos presentaron y vimos que no éramos las únicas
chicas-no-famosas-de-la-fiesta, nos sentimos un poco mejor. Con las que primero
nos hicimos amigas fue con Nicki y Laura, que eran básicamente como nosotras,
pero enseguida empezamos a hablar y a divertirnos con todas las demás.
*Narra Amanda
Por suerte tenía a Candy,
porque si no, no sé que hubiera hecho, la verdad es que con todas aquellas chicas
me sentía un poco extraña. Pero todas fueron muy simpáticas con nosotras y
enseguida me sentí a gusto. La casa de Danielle era enorme y muy bonita. En el
salón habían montado toda la fiesta: tenían los sacos de dormir, las toneladas
de comida, las almohadas, la ropa, el maquillaje, la televisión con la wii, el
aparato de música... Era genial, durante toda la noche estuvimos cantando,
bailando, riéndonos, cotilleando. Nos lo pasamos de maravilla, entre la cena
que habíamos tenido con los chicos y ahora la ''fiesta pijama'' con las chicas,
la noche fue perfecta.
Después de estar horas y
horas pasándolo bien, decidimos que iba siendo hora de dormir algo, y dormimos
profundamente hasta que el estrepitoso ruido del timbre nos despertó a todas dándonos
un susto de muerte. Candy y yo nos levantamos lentamente, ya que estábamos
agotadas después de todo el jaleo que habíamos armado durante la noche y casi
no habíamos dormido ni cuatro horas. Perrie se levantó a mirar quién era el que
llamaba, aunque su cara no parecía muy amistosa. Bueno, no me extraña; creo que
todas teníamos ganas de matar a quien quiera que estuviera llamando al timbre. Pero
la reacción de Perrie no fue la que esperaba: en cuanto vio quién era se le
iluminó la cara, así que supuse que era Zayn, su novio. Y en efecto lo era,
pero no solo él, eran Zayn, Louis y Liam. Como Zayn se entretuvo hablando con
Perrie, Candy y yo nos dimos media vuelta y continuamos durmiendo, aunque la
tregua no duró mucho.
-¡Arriba, dormilonas! ¡Ya habéis
dormido mucho!- dijo Louis, que había hablado con Eleanor y ya se estaba yendo.
-¡Louis, déjame dormir
tranquila! ¡Estoy agotada!- me quejé.
-¡Por Dios, dejad de gritar! ¡Yo
también quiero dormir!- exclamó Candy.
-No señor, vosotras dos venís
conmigo, ya está bien de hacer el vago. Liam, plan B.-ordenó Louis.
-¿Qué plan B? Louis, me
parece que estás ¡AAAAHHHH! ¡LOUIS, BÁJAME DE AQUÍ AHORA MISMO! -Louis me había
levantado del suelo con el saco de dormir y me llevaba a hombros como si fuera
un saco de patatas hasta sacarme del apartamento- ¡¿ME OYES?! ¡BÁJAME O SUFRIRÁS
LAS CONSECUENCIAS!- grité yo.
-Hahahahhaahhahaha, vamos
Amanda, no es para tanto. Hahahahaha.- Candy se reía caminando detrás de mí
pero aprovechando que estaba despistada, Liam la agarró e hizo lo mismo que Louis.
-Venga, vamos, que llegamos
tarde por vosotras- dijo Liam.
-¡NO, LIAM, NI SE TE OCURRA
LLEVARME ASÍ! ¡BÁJAME YA!- gritó Candy.
-Ahora no es tan divertido, ¿eh?
Hahahahahaha- me reí yo de Candy.
-Con que encima te ríes, ¿eh?
¡Pues ahora verás!- dijo Louis.
-Uy ¡qué miedo! Hahahahaha-
me reí de Louis.
-¿Seguro? Bueno, tú lo has
querido- entonces Louis empezó a hacerme cosquillas y yo no podía parar de reír,
aunque quisiera, no podía. Mientras tanto, Candy se reía de mí y Liam también. Zayn,
sin embargo, iba pensativo y creo que en realidad no se estaba dando cuenta de
nada, porque estaba en su mundo.
-¡Está bien, vale, me rindo,
pero por favor, para! Hahahahahahahaha- le rogué a Louis, no podía aguantar más
cosquillas, si no paraba pronto, iba a acabar teniendo agujetas en toda la
barriga de tanto reír.
-Uff, chicos, vaya manera de
tratar a dos damas -dijo Candy fingiendo indignación-. Por cierto, ¿a dónde
vamos con tanta prisa?
-Bueno, eso no os lo podemos
decir- bromeó Liam.
-Pero, ¿por qué no?.- pregunté.
-Pues porque es una sorpresa.
Tened paciencia, ya veréis que os gustará mucho- dijo Louis.
-Ay, madre, me dais miedo. Hahaha-
rió Candy.
-Hahaha, no te preocupes, no
es ni peligroso ni arriesgado. ¿O si?- añadió Liam enigmático.
-Claaaro, tú déjanos con la
intriga.- protesté.
-Hahaha, bueno, vosotras
esperad, encima que os hemos sacado como a dos princesas y os llevamos en
brazos- rió Lou.
-¡Pues qué manera de sacar a
dos ''princesas''!- dijo Candy.
-¡Pues sí! No creo que liguéis
mucho de esa manera, hahahaha.- ataqué yo.
-Bueno, ya. Dejad el tema,
que ya estamos llegando y os vamos a poner una venda en los ojos para que no veáis
a dónde os traemos. ¡Así será más divertido y os llevareis una sorpresa mayor!-
dijo Zayn.
-¡Hombre, Zayn, si estás aquí!
No te había visto, ni oído -ironizó Candy.
-Mmmm, bueno, pensaba en mis
cosas, supongo- se defendió Zayn.
-Vale, esperad un momento,
que os colocamos las vendas. ¡Os va a encantar!- prometió Louis.
-¡Socorro! ¡A saber a dónde
nos han traído!- dije yo.
Nos pusieron unas vendas en
los ojos y comprobaron que no viéramos nada de nada. Entonces siguieron
caminando y, pasados cinco minutos, se detuvieron. Más o menos cinco minutos más
tarde llegó alguien, deduje que era un chico por la voz, y concluí que se conocían
y que venía con nosotros.
-¡Al fin has llegado! ¿Estás
listo?- preguntó Louis.
-Sí, ¿son ellas tus amigas?-
se interesó el chico misterioso.
-Sí, son Amanda y Candy. Ahora
te las presentaremos, es que llevan los ojos vendados para que sea una sorpresa
cuando vean adónde las hemos traído.-dijo Louis.
-Ah, bien, bueno. Entonces
vamos para allá.- cerró el chico.
Entonces empezaron a caminar
de nuevo, ellos seguían hablando con el chico. Sentía curiosidad por saber quién
era. Creo que caminamos unos diez minutos, aunque se me hicieron eternos. Luego
pararon y empezaron a hablar con quien supuse que era una señora, o al menos
tenía voz de señora de cincuenta años.
-Buenos días, soy Louis
Tomlinson.- se presentó muy correcto Lou.
-¿Tiene reserva?- interrogó
la señora.
-Sí, está a nombre de ''The
Tommo''- dijo Louis.
-Ah, sí, aquí está. Es para
seis, ¿no?- respondió la señora.
-Sí, exacto. ¿Está todo listo
para empezar?- preguntó a su vez el chico misterioso.
-Sí, pasen por aquí, por
favor.- indicó la señora.
Volvimos a movernos y
entramos en un espacio que olía a humedad. Supuse que sería una piscina, un spa
o algo así. Entonces Louis me bajó y Liam dejó en el suelo a Candy.
-¿Estáis preparadas para ver
adónde os hemos traído?- preguntó Liam.
-Supongo que sí... Chicos, me
dais un poco de miedo- dijo Candy.
-Hahaha. No te preocupes,
Candy. Seguro que te gusta- bromeó Zayn.
Entonces nos quitaron la
venda y lo primero que vimos fue...
No hay comentarios:
Publicar un comentario