viernes, 11 de enero de 2013

CAP #7


*Narra Harry.

-Emm... si no te importa; voy a estudiar. Así aprovecho el tiempo- me dijo Candy.
-Oh, sí. Tú estudia, yo estaré por aquí... haciendo... cosas...- en realidad no pensaba hacer nada. Así que le envié un mensaje a Louis, necesitaba su ayuda. (Louis SOS! Candy se ha puesto a estudiar. ¡¿Qué hago?!) Louis me contestó. (Bueno, distráela. Acércate por detrás y sorpréndela acariciándole el pelo.) Le escribí. (¡¿Cómo quieres que haga eso?! ¡¿Qué va a pensar de mí?!) Louis parecía divertirse. (Harry, solo tienes que poner tu mano en su pelo. No es tan complicado. Hahaha. Simplemente estarás siendo cariñoso con ella. ¡Pero no hagas el burro!)
Candy siguió estudiando unas dos horas, mientras yo me decidía a acercarme a ella. Lo sé, soy un poco lento decidiendo. Pero al final me dije a mí mismo que estaba perdiendo el tiempo, así que finalmente me levanté y me acerqué lentamente hacia Candy, que parecía estar muy concentrada en el libro. Primero le puse la mano sobre el hombro y luego le acaricié el pelo. Ella se giró y me dijo.
-Harry... ¿qué haces?
-¡No hago el burro! Digo, solo te toco el pelo.
-Ya me he dado cuenta, la pregunta es ¡¿por qué me tocas el pelo?!
-Bueno... yo... es que... ¡me recuerda a un gato!- Mierda, seré idiota. ¡¿Cómo se me ocurre decir eso?!
-Ah, genial. Eso lo explica todo- Candy se enfadó. Se levantó y se fue al baño.
¡Seré idiota!- le mandé otro mensaje a Lou, explicándole lo que había pasado. Literalmente, lo que me contestó fue: "¡Serás idiota! Bueno, ahora tienes que hacer algo para que salga del baño. No sé el qué, pero haz algo".
-Genial, vamos Harry, piensa...- se me ocurrió poner la radio y la canción que empezaba a sonar era ''Isn't she lovely'' de Stevie Wonder. No se me ocurrió otra cosa que coger un rotulador grueso que tenía Candy en la mesa.Toqué a la puerta del baño y Candy salió. Entonces empecé a hacer un playback de la canción, con baile y todo, usando el rotulador como micrófono. Candy parecía divertida, aunque ella quería mostrar su enfado. La cogí de la mano y la saqué del baño, mientras seguía cantándole en playback. Ella quería escaparse de participar en mi actuación improvisada, pero yo la cogí de la cintura y la acerqué hacia mí. Nuestras caras estaban a un par de centímetros, pero luego la cogí de la mano, le di una vuelta y empecé a bailar con ella, mientras ''cantaba''. Estuvimos así durante toda la canción, y cuando acabó estábamos tan cansados que nos tumbamos en la cama, mientras reíamos.
-Uff, ¡qué agotamiento! Hahaha- se reía Candy.
-Sí, hahaha. Por cierto, siento haber dicho que tu pelo me recordaba a... un gato. Es que soy un poco torpe cuando estoy nervioso...- me disculpé. 
-Ah... no pasa nada. ¡Ya se me había olvidado! Hahaha- dijo Candy.
-Oh, ¡genial! Voy yo y te lo recuerdo. Bien hecho, Harry- me reñí a mí mismo.
-Hahahaha. Da igual, no me molesta. Después de tu súper actuación todo queda olvidado. Además, justo ha sonado mi canción favorita- me explicó Candy.
-¿Es tu canción favorita?
-Sí, desde hace un tiempo. Sé que no es la típica canción favorita que esperas que una chica tenga. Pero cuando la escuché me gustó tanto, que hasta ahora ninguna canción la ha superado. Hahaha.
-Bueno... a lo mejor te parece un poco raro, porque nos acabamos de conocer y eso. Pero hablando contigo siento como si te conociera desde hace mucho. Entonces, ¿qué te parecería si yo te dijera que ésta puede ser nuestra canción? Me refiero como amigos y eso, no pienses nada malo...- me estaba poniendo muy nervioso, nunca me había sentido así. Cuando Candy me miraba, me olvidaba de todo. No sabía qué estaba sintiendo...
-¿Nuestra canción?
-Si te parece incómodo... o no crees que podamos ser buenos amigos...
-¡Me encantaría que esa fuera nuestra canción!- Candy me interrumpió. Cuando me dijo esto, me alegré de repente.- Simplemente, ¡es genial! Yo también pensaba en decirte algo así, pero me daba mucha vergüenza. Hahaha. La verdad es que desde que te conocí y hablé contigo, es como si te conociera de toda la vida, es increíble.
¡Genial! Entonces es oficial, ''Isn't she lovely'' es nuestra canción- sonreí, al escuchar las palabras de Candy me sentí aliviado.
-Entonces... ¿somos algo así como mejores amigos?- preguntó ella.
-Sí, algo así, supongo. Me da la sensación de que nos vamos a llevar muy bien, no sé, tengo esa impresión.
-Sí, a mí también. Desde que te conozco me caes muy bien. Seguro que será genial ser amigos.
Como era la hora de comer, pedimos comida china y nos la trajeron a la habitación, luego estuvimos toda la tarde hablando y pasándolo bien. Era increíble cómo nos complementábamos el uno con el otro, como si nos conociéramos de toda la vida. Me encantaba estar con ella, me lo pasaba genial aunque no hiciéramos nada más que hablar.


*Narra Amanda.

Cuando dejamos a Candy y a Harry fuimos a dar una vuelta por el centro comercial, para pasar el rato. Y cuando tuvimos hambre nos acercamos a Nando's, al parecer el restaurante favorito de Niall. Nos pusimos las botas, creo que nunca había comido tanto ¡y tan bueno! Acabamos de comer y estuvimos paseando un par de horas más; lo que hicimos básicamente fue ir de compras. ¡nunca imaginé que ir de compras con cuatro chicos fuera tan complicado! Debían ser las siete de la tarde cuando fuimos al parking porque los chicos querían ir a casa, estaban agotados. Allí nos despedimos de las chicas, que habían llegado con su propio coche. Esta vez fui en el coche con Louis y Liam, Zayn fue con Niall. Yo no tenía ni idea de adónde íbamos, porque nunca había estado en su casa. Pero como me fiaba de ellos, tampoco me preocupaba mucho. Fuimos reduciendo la velocidad cuando pasamos por delante de una casa unifamiliar, bastante grande, de la cual me gustó mucho el espacioso jardín delantero que tenía. Aparcamos allí y bajamos del coche, Niall venía detrás nuestro. Louis sacó las llaves y entramos en un espacioso y bien decorado recibidor. La casa era muy bonita por dentro y estaba muy ordenada; cosa rara teniendo en cuenta que en ella viven cinco chicos. Pasamos a un amplio y bonito salón, me senté en el sofá.

-Amanda, quédate aquí. Voy a la cocina a buscar algo de beber. Por cierto, ¿te apetece que pida unas pizzas para cenar?- me preguntó Louis.
-¿Qué hora es?- dije yo.
-Pues, creo que son casi las ocho. Caray, el tiempo pasa volando- contestó Louis.
-Vale, por mí genial. Pide una de cuatro quesos para mí, por favor- le pedí.
-Okey, una cuatro quesos para Amanda, una barbacoa para mí, Liam seguro que quiere una de salmón, para Zayn una de pollo y para Niall otra cuatro quesos -apuntaba mentalmente Louis- Mmm, Niall ¿tú te vas a comer una pizza entera?
-No sé, la verdad es que hoy no tengo mucha hambre, después de ir a comer a Nando's...- contestó Niall.
- ¡Oh Dios mío! ¡Un milagro! -se burló Louis- Y tú, Amanda. ¿Te comerás una pizza entera?- me preguntó.
-No creo, he comido mucho- contesté.
-Entonces, ¿os va bien que pida una de cuatro quesos para los dos?- dijo Louis.
-Por mí no hay problema- respondió Niall.
-Genial, una para los dos va bien- dije yo.
-Vale, ahora voy a pedirlas- Louis se metió dentro de la cocina y le oí hablar por teléfono.

Una media hora después llegaron las pizzas. Aunque habíamos comido mucho en Nando's yo empezaba a tener hambre. Nos sentamos todos alrededor de la mesita del salón y nos comimos la pizza mientras veíamos la televisión. A Louis se le ocurrió poner una película, y justo emitían un maratón Disney y en ese momento ponían 'Toy Story'.

-¡Cuánto tiempo hace que vi esta película! Me recuerda a mi infancia- dije yo.
-¡Louis, vamos a verla! ¡Por favor, por favor, por favor!- suplicó Liam.
-Vale, vale. Vamos a ver 'Toy Story'-. accedió Louis.
-¡Bien! ¡Me encanta esta película!- dijo Liam.

Por lo que vi, 'Toy Story' es la película favorita de Liam. ¡Qué mono! Estuvimos viéndola y Zayn hizo palomitas. Estuvimos un poco apretados en el sofá, ya que Louis quería estirarse y dejaba menos espacio para los demás, pero aun así estuvimos a gusto. Cuando acabó la película miré la hora, eran las diez y media, pero no quería volver a la residencia porque sabía que a Candy le gustaba ese chico, aunque ella no me lo hubiera dicho, se notaba; y no quería interrumpirles.

-Emm... chicos, ¿os importa si me quedo un rato más? Es que no quiero interrumpir a Harry y a Candy- pregunté tímidamente.
-Claro, nos encanta estar contigo- dijo Zayn- ¿Verdad, chicos?
-Sí, eres genial- respondió Liam.
-Gracias, de verdad. A mí también me encanta estar con vosotros- dije yo.
-Bueno, ¿qué os apetece hacer?- dijo Louis.
-Pues... no sé. ¿Tenéis algún juego de mesa o algo?- pregunté yo.
-Sí, creo que tenemos algunos arriba, en el desván-. contestó Niall.
-Es verdad, los guardamos todos ahí cuando hicimos la limpieza- se acordó Liam.
-¿Subo y cojo algunos?- se ofreció Niall.
-Sí, por favor. Nosotros vamos limpiando y recogiendo la mesa- dijo Zayn.

Niall se levantó y fue hacia las escaleras, nosotros empezamos a coger las cajas de pizza y los vasos. Fuimos a la cocina y tiré las cajas a la basura, mientras ellos fregaban los vasos y acababan de limpiar la mesita. De repente escuchamos una especie de grito. Nos quedamos en silencio. Otro grito.

-¿Habéis oído eso?- preguntó Liam asustado.
-Era como un grito...- susurré yo.
-Venía de arriba, tenemos que ir a ver qué pasa- dijo Zayn.
-Bueno, vayamos todos juntos. Así nadie se queda solo aquí abajo- acabó Louis.

Yo me pegué a Zayn, que parecía tener más seguridad, porque los demás iban tan asustados que solo les faltaba temblar. Subimos las escaleras lentamente, en tensión. Parecía una película de miedo. El piso de arriba estaba todo oscuro, así que a medida que avanzábamos íbamos encendiendo luces. Seguíamos oyendo ruidos, que venían del fondo del piso de arriba.

-¿Y si a Niall le ha pasado algo?- se me ocurrió.
-Puede ser, porque parece que el ruido viene de ahí- Louis señaló a la puerta del desván.
-¡Niall! ¡¿Eres tú?!- gritó Liam.
-¡Socorro! ¿Chicos? ¡Ayudadme!- oímos a Niall.
-¡Es Niall! Vamos al desván- dijo Zayn, muy seguro.

Fuimos directos hacia la puerta del desván, que estaba cerrada y Zayn le preguntó a Niall qué había pasado. Él nos explicó que entró en el desván a buscar los juegos y que cuando quiso salir, la puerta se había atascado, y no podía salir, ni siquiera empujando. Nosotros probamos a abrirla desde fuera, pero ninguno de los chicos pudo.

-¿Y si llamamos a los bomberos?- propuse.
-Bueno, a mí se me ocurre una cosa- dijo Louis.
-Entonces, dinos. ¿Qué idea tienes?- insistió Liam.
-A ver, las bisagras de la puerta están por dentro, y hay un conducto de ventilación. Si alguien pequeño y delgado pasara por el conducto y le llevara a Niall un destornillador, él desatornillaría las bisagras y la puerta caería abajo- explicó Louis.
-¿Y no podemos pasarle el destornillador por el conducto sin más?- preguntó Zayn.
-No, porque el conducto es en forma de L, y aunque lo lanzáramos con mucha fuerza, no llegaría al otro lado. Sin embargo, una persona delgada y pequeña cabría...- dijo Louis. Entonces los tres se giraron y me miraron a mí.
-¿Qué? -entonces me di cuenta de lo que pretendían-. Oh, no. No señor, ni de coña me voy a meter yo en un conducto de ventilación. Chicos, no podéis estar hablando en serio. Vamos, dejad de tomarme el pelo. Vamos a pensar alguna manera de sacar a Niall de ahí-. Ellos quedaron mirándome, como insistiendo en que yo aceptara. Pero de ninguna manera me iba a meter yo por ahí para sacar a un chico que ni siquiera me caía bien. De ninguna manera me convencerían.

No hay comentarios:

Publicar un comentario